Existen varios aspectos que cambian en la vida de los adultos mayores, entre ellos, el sueño. En la mayoría de los casos, la persona pasa por períodos en los que duerme poco durante la noche, para posteriormente tomar una o dos siestas durante el día.
Estos cambios en los hábitos del sueño pueden alterar la rutina familiar ocasionando en la persona malhumor por no dormir bien en la noche, somnolencia durante el día y falta de atención debido a la falta de sueño, lo que puede provocar caídas y accidentes.
Existe una teoría que menciona que es posible que los adultos mayores duerman menos debido a que su cerebro ya ha madurado y no requiere de descanso adicional para conservarse. Aunque en realidad nadie sabe con exactitud cuál es la razón para estos cambios.
Los expertos recomiendan la realización de un estudio de higiene del sueño que descubra los factores internos y externos que pueden afectar el descanso del individuo. Dentro de las preguntas que se realizan en este estudio se incluyen: a qué hora se acuesta, cuánto tiempo pasa hasta quedarse dormido, si consumió alimentos antes de ir a la cama, cuántas horas duerme por la noche, cuántas veces se despierta, cuánto tiempo para antes de conciliar el sueño nuevamente, etc.
Todas estas preguntas permitirán al especialista generar un diagnóstico y ayudar a mejorar la calidad del descanso del adulto mayor concentrándose tanto en los aspectos internos y externos.
¡Hasta la próxima!
Imagen: Flickr
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